Creando un ambiente positivo para el aprendizaje de un segundo idioma desde la infancia
15/02/2025

Aprender un segundo idioma es una experiencia enriquecedora que abre puertas a nuevas oportunidades, culturas y formas de pensar. Sin embargo, para que este proceso sea efectivo y motivador, es fundamental que se desarrolle en un entorno positivo y de apoyo. En la infancia, donde las emociones juegan un papel clave en el aprendizaje, la confianza y la seguridad emocional son la base para que los niños y niñas se sientan cómodos explorando y expresándose en un nuevo idioma.

En este artículo, exploraremos la importancia de crear un ambiente afectivo y estimulante que favorezca la adquisición del inglés, y compartiremos estrategias prácticas para lograrlo.

El impacto del ambiente en el aprendizaje del inglés

Desde muy pequeños, los niños y niñas aprenden a través de la observación, la imitación y la interacción con su entorno. Si sienten que el aprendizaje de un segundo idioma es una experiencia segura, libre de presiones y llena de estímulos positivos, estarán más motivados para participar activamente y experimentar con el idioma.

Un ambiente positivo para el aprendizaje del inglés debe incluir:

✅ Seguridad emocional: Un espacio donde el error se vea como parte del aprendizaje y no como un fracaso.
✅ Interacciones afectuosas: La conexión con el adulto de referencia (madres, padres, educadores) es clave para que los niños y niñas se animen a comunicarse en inglés sin miedo.
✅ Entorno lúdico y estimulante: Juegos, canciones, cuentos y rutinas que hagan del inglés una experiencia divertida y significativa.
✅ Refuerzo positivo: Celebrar los intentos y logros, en lugar de corregir de manera rígida, fomenta la confianza en sí mismos.

Estrategias para crear un ambiente positivo en el aprendizaje del inglés

💡 1. Hacer del inglés parte del día a día

La exposición constante y natural al idioma es clave. Introducir el inglés en las rutinas diarias a través de canciones, saludos, órdenes sencillas o juegos ayuda a que los niños y niñas lo integren de manera orgánica y sin sentirlo como una obligación.

Por ejemplo:
🛁 Durante el baño: "Let’s wash your hands!"
🍏 A la hora de comer: "Do you want an apple or a banana?"
👟 Al vestirse: "Put on your shoes!"

💡 2. Jugar es la clave

El aprendizaje debe ser una experiencia divertida y libre de estrés. Actividades como juegos de roles, teatro de marionetas o canciones interactivas ayudan a que los niños y niñas practiquen inglés de manera espontánea, sin miedo a equivocarse.

Ejemplo: Organizar una “tienda” en casa o en el aula y jugar a comprar y vender en inglés usando frases sencillas como "How much is this?" o "I would like some bread, please."

💡 3. Crear un espacio de confianza

Es normal que los niños y niñas sean tímidos al expresarse en un idioma nuevo. Por eso, es fundamental que sientan que no serán juzgados por sus errores. En lugar de corregir de manera directa, es mejor reformular la frase correctamente dentro de la conversación.

Ejemplo:
👧 Niño/a: "He go to school."
👩‍🏫 Adulto: "Oh yes, he goes to school every day!"

De esta manera, se les da el modelo correcto sin desmotivarlos.

💡 4. Celebrar los logros, por pequeños que sean

Cada palabra nueva, cada intento de comunicación en inglés, merece ser celebrado. El refuerzo positivo motiva a los niños y niñas a seguir practicando y explorando el idioma. Un simple "Great job!", una pegatina o un aplauso pueden hacer la diferencia.

💡 5. Ser un modelo lingüístico

Los niños y niñas aprenden imitando, por lo que es importante que escuchen inglés en su entorno. No es necesario ser hablante nativo, sino atreverse a usarlo con naturalidad.

Puedes hacerlo con frases sencillas en tu día a día:
🖍️ "Let’s draw a big blue circle!"
🚀 "Wow, your rocket is amazing!"

💡 6. Respetar su ritmo

Cada niño y niña tiene su propio tiempo de aprendizaje. Algunos empezarán a hablar en inglés rápidamente, mientras que otros necesitarán más tiempo de escucha antes de sentirse cómodos. ¡Ambas formas son válidas! Lo importante es no forzar el proceso y permitir que el idioma se adquiera de manera natural.

Conclusión

Crear un ambiente positivo para el aprendizaje del inglés en la infancia es clave para que los niños y niñas se sientan seguros, motivados y felices de explorar un nuevo idioma. Un entorno de confianza, juegos, rutinas en inglés y refuerzo positivo hará que el aprendizaje sea una experiencia emocionante y libre de presión.

Cuando los niños y niñas disfrutan aprendiendo, el idioma deja de ser solo una materia y se convierte en una herramienta de comunicación real. Y lo mejor de todo: lo aprenderán sin darse cuenta, a través de la diversión y la interacción diaria.

💡 ¿Te gustaría más ideas para crear un entorno positivo en el aprendizaje del inglés? Cuéntamelo en los comentarios o comparte tu experiencia. 😊💬